Hola de nuevo querida lectora, volvemos a encontrarnos para recibir febrero en los próximos días, en este 2020 bisiesto.
Antes de profundizar en el tema de hoy, confiamos en que la gratitud y la ecuanimidad que has ido entrenando con mayor o menor frecuencia, instante a instante, momento a momento, experiencia a experiencia, te haya permitido generar ese poso de bienestar y satisfacción contigo misma y con tu día a día.
Una vida cotidiana quizás repleta de compromisos, de tareas, de “prisas”, pero con la intención de ir ampliando esa atención plena en este maravilloso regalo que es la vida.
“El Silencio es el abono que hace florecer el alma”
Proverbio Chino
En esta ocasión queremos invitarte a poner mayor acento en el silencio, ese espacio rico e inaudito en el que todo emerge, y que a muchas personas le puede resultar incómodo.
Actualmente, diversos estudios e investigaciones recientes en el campo de la neurociencia demuestran que el silencio es esencial para regenerar nuestro cerebro. Es clave para desarrollar la creatividad, nuestra memoria y la construcción de la propia identidad, al estar en contacto contigo misma sin hacer nada. Mindfulness es el arte de “hacer el no hacer”, y desde ahí el silencio es un potenciador de la concentración y visión más clara del entorno.
De hecho, en un estudio publicado en el año 2013, se demostraba que nuestras neuronas se reproducen. Sumergieron en el silencio a ratones durante 2 horas diarias y observaron cómo se creaba una cantidad mayor de células nuevas en el hipocampo. El silencio impacta directamente en nuestras neuronas, hasta tal punto, que se ha descubierto que dos minutos de silencio son suficientes para que disminuyamos la presión arterial y el ritmo cardíaco.
Cuando hablamos de silencio, nos referimos al silencio como la ausencia de estímulos externos. Si bien es cierto, que nuestro cuerpo está vivo y en continuo movimiento y posee su propio ruido interno, sutil pero presente, por lo que no existe el silencio absoluto.
Algunas de las personas que asisten a nuestras sesiones, nos comentan que entrar en contacto con el silencio, les asusta o les inquieta, porque aparecen lo que denominan nuestros ruidos internos. Pueden aparecer nuestros “fantasmas”, miedos, preocupaciones, etc… y ello nos puede llevar a evitar el silencio, tan necesario para generar nuestro reseteo y bienestar. Sin embargo, a otras personas el silencio les genera sensaciones agradables o curiosidad o confianza, hasta tal punto, que lo buscan siempre que están fuera de su centro o equilibrio. Estas personas lo experimentan con una forma, natural y explicita de entrar en contacto contigo y con todo aquello que habita en nuestra mente, permitiéndoles conocerse mejor e implementar conductas efectivas que les facilitan conseguir sus objetivos.
Independientemente de cómo lo experimentes, podemos indagar cómo los sonidos de la naturaleza en ocasiones ayudan a generar bienestar, despertando en nosotras sensaciones agradables e incluso un fenómeno psicológico, el ASMR, que consiste en una respuesta sensorial meridiana autónoma agradable, como hormigueo en la punta de los dedos o en el cuero cabelludo, que se asocia a la secreción de dopamina o también llamada la hormona de la felicidad.
Hace un tiempo leíamos un artículo que hacia mención a los “llamados baños de bosques” que se habían puesto de moda en las celebrities americanas, y en los colegios japoneses, donde realizaban con los alumnos paseos de unos 30 minutos en silencio a través del bosque. Se ha demostrado que el estar en silencio en contacto con la naturaleza disminuye la hormona del estrés, reduce la tensión arterial, el azúcar en sangre, mejora la salud cardiovascular, la memoria y nuestra capacidad de concentración y nuestro sistema inmunitario.
Por ello, te invitamos a explorar el silencio desde tu interior cerrando los ojos, en un viaje con atención plena, que te regenerará emocional, física, y el corporalmente.
Reconecta con el noble silencio y experimenta con atención plena cada momento.
¡Nuestros mejores deseos para un caminar consciente por este 2020!